Ante la libertad, la responsabilidad
Cuando la mayoría de personas hablan de hacer uso de su libertad muchas veces pasan por alto un elemento sumamente importante, «la responsabilidad».

En las últimas semanas hemos sido testigos de una serie de manifestaciones, protestas que van desde marchas peatonales pacíficas, hasta actos de violencia como lo es el paro de calles y carreteras. Y seguramente te estás preguntando ¿Qué tienen de violentos los bloqueos en las calles, si nadie salió herido?
Puede ser que nadie haya salido herido, o quizás entre tanta conmoción ni siquiera te hayas enterado, pero lo cierto es que los bloqueos de la semana pasada nos afectaron a muchos guatemaltecos y principalmente se vieron violentados nuestros derechos, quizás te preguntes ¿cuáles derechos? Lo cierto es que como individuos, cada guatemalteco goza de tres derechos naturales e inalienables que todos deberíamos de respetar entre sí, estos son la vida, la libertad y la propiedad que por definición natural, ya se debería entender que es privada. Estos son los únicos derechos que como individuos gozamos y los cuales debieran de ser salvaguardados por el gobierno, el amplio catálogo de «derechos humanos» que nos han vendido durante mucho tiempo, no es más que una serie de servicios que los terminan pagando las demás personas, en ocasiones exigencias absurdas que sirven para imponer más leyes, y que el gobierno se entrometa más en los asuntos privados de las personas.
Partiendo de esta idea, los únicos tres derechos que el gobierno debiese de resguardar y que la mayoría de guatemaltecos deberíamos de respetar para con cada uno de nuestros prójimos, terminan siendo los que más se ven afectados y sobre los cuales, ya no hay respeto ni mucho menos protección. Pues para ejemplo de esto, los bloqueos de la semana pasada.

Un bloqueo en las calles y carreteras del país, es un acto violento, porque atenta contra un derecho inalienable como lo es la libertad, en este caso, la libertad de poder movilizarse libremente, por las vías del territorio guatemalteco, las cuales valga la pena mencionar, son fruto de nuestros impuestos y además son de mucha utilidad para la mayoría de ciudadanos que necesitan transportar mercaderías por todo el territorio, o a ellos mismos, ya sea por trabajo, alguna necesidad o urgencia médica o simplemente por placer. El punto es que con cada bloqueo, aquellos que manifiestan su descontento contra las innumerables problemáticas, no se dan cuenta que más que resolver el problema, solamente están perjudicando a una enorme cantidad de ciudadanos, quienes nos vemos vulnerados, en estos casos con una limitación a nuestra libertad de poder dirigirnos a algún lado.
Y muchos dirán que en términos de libertad, también hay libertad de expresión, y que esta debiese verse resguardada también, y que lo que las personas que bloquean las calles hacen, no es más que gozar libremente de esa libertad que los individuos tienen para manifestar sus pensamientos y disconformidades, sien embargo, por esto mismo hago un llamado a la reflexión, ante la libertad, debe existir la responsabilidad.
Principalmente en nuestros actos. Si bien es cierto cada uno de nosotros gozamos de derechos inalienables, no hay que olvidar que las demás personas también gozan cada una de esos mismos derechos, por lo que el único límite de nuestros derechos, debieran ser los derechos de alguien más. Es decir que nadie puede afectar nuestra vida, nuestra libertad ni nuestra propiedad, pero tampoco nosotros podemos vulnerar la vida, la libertad ni la propiedad de los otros.
En el caso de las protestas, no puedes anteponer tu libertad de expresión, sobre la libre locomoción de los demás, en primera instancia, porque los conductores, transportistas, en ningún momento están vulnerando la libertad de quienes quieren manifestar su descontento con la sociedad, siempre y cuando la forma en la que lo hagan sea pacífica y no los afecte a ellos. Tan fácil sería que aquellos que quieran dar sus discursos, presentar carteles o pancartas de protesta lo hiciesen al margen del respeto y sin afectar a los otros es decir en áreas libres de circulación de vehículos, ya que cuentan con esta alternativa.
Sin embargo no se puede aplicar el mismo caso con los automovilistas, quienes ven vulnerado realmente su derecho a circular por las calles, porque ellos necesitan hacerlo, sin embargo debido a las condiciones naturales y a las características puras de los vehículos o demás medios de transporte, no pueden hacerlo en otro espacio, debe ser si o si por medio de las calles y carreteras.
Cuando te dispongas a manifestar, que claro, estas en libertad de hacerlo, sé consciente que debes ser responsable de que tu manifestación no afecte a terceros, y no vulneren los derechos de alguien más, la mayoría sabemos el descontento y la inconformidad con el sistema actual, pero perjudicando a la mayoría de guatemaltecos igual de inconformes que tu seguramente, no logras cambiar nada, al contrario sumas un problema más a la lista.
Y si bien en esta ocasión abordamos el tema de la responsabilidad desde el ejemplo de los bloqueos, también esto es aplicable en general a todo aquello que realicemos que comúnmente se pretende justificar con el término «libertad, y en las próximas columnas seguiré expandiendo más este tema desde otros ejemplos para ir aclarando el panorama y cambiando la conversación de tal modo que sepamos defender nuestros derechos, pero con conocimiento real de los mismos.
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